sábado, 10 de diciembre de 2011

Nostalgia

















Nostalgia convertida en piedra. Silencio abrumador que inunda todo. Se lleva todo por delante. No comprendo que me ocurre. No soy capaz de desenredar el ovillo que está  apretando mis entrañas. El dolor forma parte de un todo. Quizás de un nada.

Destellos de felicidad que ahora parecen tan efímeros. Tan lejanos. Lágrimas que se niegan a rodar por mis mejillas. Incluso ellas están cansadas.

Sentimiento infantil. Absurdo. Incomprensible. Inunda todo mi ser y me encoge como un pedazo de plástico bajo una llama. Retorciendose. Desprendiendo un hedor a silencio.

No puedo conectar con lo que me rodea. Mi mente se aísla del exterior. No puedo devolverte la sonrisa. No me sale. No puedo dejarte oír mi carcajada. No soy capaz.

Solo quiero dormir. Cerrar los ojos y trasladarme. Sentirme mejor. Sentirme viva en un islote del Aqueronte.

A veces me gustaría tener un botón. Pulsarlo y esfumarme del mundo

Demasiados cuervos. Demasiadas sombras. Demasiado difícil.
Dilema por elegir. Indecisión de vida. No se sentirme llena. Mi sed de felicidad es engañosa. Mi inconformismo. Mi inquietud. Mis preguntas atormentadoras. Mis juicios. Mis miedos.

Yo misma.

No hay comentarios:

Publicar un comentario