Al igual que tienes un hueco en mi corazón para siempre lo tienes en mi blog.
Gracias por cruzarte en mi vida por pedir plaza para ese campamento y por todo lo que ha venido después, por formas parte de mi vida en esos años en Bilbao, por ser tan estupenda compañera de piso y sobretodo amiga. Por los "un piti mas y me voy a la cama" por las visitas de habitación y las terapias intensivas. Por reír y llorar juntas y por todo el futuro que nos queda por delante, lejos o cerca, nunca dudo que puedo contar contigo y que eres una de mis estrellas que más brilla.
Te quiero koalita.